Los discursos parlamentarios de Práxedes Mateo-Sagasta

El Sr. Presidente del Consejo de Ministros (Sagasta): No recuerdo el párrafo de mi discurso en que hablé de veleidades, de enojos o de impaciencias de algunos amigos, y hasta de ingratitudes; pero me parece que fue aquel en que yo me quejaba de la amargura que me producía este puesto, para [674] tener cariño en conservarlo, y en este caso, como queja de familia, creo que dije: ?Pues si no solo tengo que sufrir la lucha de los adversarios, sino que apurar la amargura que me producen las veleidades de los unos y las impaciencias de los otros.? ¿Es que el Sr. Duque de Tetuán se puede creer ofendido por esto? No. ¡Pues si a S.S. le considero como adversario; como que desde la primera legislatura creo que le tengo enfrente! (El Sr. Duque de Tetuán: Desde los sucesos de septiembre). Bueno; pero hace mucho tiempo. (El Sr. Duque de Tetuán: Desde 1886). Pues a mí me parece muy larga la fecha; pro consiguiente, si amigos íntimos míos, a quienes yo quiero mucho, no obstante esta circunstancia, algunas veces me dan disgustos porque no tienen paciencia, no es extraño que con ellos riña, sin que eso les moleste para nada, porque ya sabe S.S. que con aquellas personas a quienes más se quiere, es con las que comúnmente más se riñe. [675]